Depósito flexible

¿Qué es un depósito flexible?

Un depósito flexible es un producto de almacenamiento que se expande a medida que se llena su depósito. La ventaja de una cisterna flexible sobre una cisterna rígida es que es más fácil de mover, más fácil de instalar y más barata de comprar.

Los depósitos flexibles suelen ser de PVC, poliéster de alta resistencia y están especialmente desarrollados para almacenar agua, nitrógeno líquido,abonos u otros líquidos. Una cisterna flexible tiene una vida útil general de 15 años.

¿Cuáles son las ventajas de un depósito flexible?

Un depósito flexible es una solución que puede ser ideal en determinados casos. En primer lugar, un depósito flexible evita cualquier evaporación de los líquidos almacenados, lo que le permite conservar un máximo del líquido contenido en su cisterna. Un depósito flexible se adapta al volumen de líquido que almacena, lo que significa que el líquido no está en contacto con el aire. Esto evita la oxidación, la contaminación por microorganismos o la polución, y el desarrollo de mosquitos, por ejemplo, en el caso del almacenamiento de agua. La mayoría de las cisternas flexibles están tratadas contra los rayos UV, lo que también impide el desarrollo de algas en el agua, el nitrógeno líquido, el agua de lluvia o los hidrocarburos.

Un depósito flexible es fácil de transportar y manejar, lo que simplifica las operaciones de limpieza, vaciado y llenado. Los materiales utilizados en la fabricación de una cisterna flexible son fácilmente reciclables, lo que hace que la elección de una bolsa flexible sea más ecológica en comparación con las cisternas fijas o las cisternas sobre bastidor. La cisterna flexible también se beneficia de una ventaja reglamentaria, ya que su instalación no requiere permiso de conducción ni grandes movimientos de tierra, como ocurre, por ejemplo, con las cisternas subterráneas. Por último, el método de construcción de un depósito flexible le permite adaptarse perfectamente a lugares estrechos o con una disposición poco habitual.

¿Cuáles son los distintos tipos de depósitos flexibles?

Como ya se ha mencionado, un depósito flexible es perfectamente adecuado para el almacenamiento de diferentes tipos de líquidos: agua, agua de lluvia, efluentes, abono líquido, hidrocarburos, reservas contra incendios. En algunos casos puede ser necesario almacenar agua potable para garantizar un suministro continuo. Este tipo de depósito flexible permite rellenar fácilmente el agua potable gracias a su superficie horizontal, plana o en forma de diamante. Un depósito flexible de este tipo puede instalarse en apenas 10 minutos.

Una solución ecológica cada vez más considerada por profesionales y particulares es la recogida de agua de lluvia. También en este caso, la cisterna flexible representa una solución ideal y rápida para garantizar el almacenamiento del agua de lluvia. Estas cisternas flexibles suelen estar disponibles en tamaños que van desde los 3 m3 hasta los 50 m3 para las necesidades más grandes.

También se pueden almacenar diversos efluentes mediante un depósito flexible. Los depósitos flexibles para efluentes pueden integrarse perfectamente en un circuito de tratamiento de aguas residuales, tratamiento de aguas, lodos o en un sistema de recuperación de agua. Esta solución de almacenamiento permite una rápida instalación, contención de olores, solución antifúngica y protección constante contra la lluvia. Esta solución le permite ser flexible en todos los casos, ya que los volúmenes van de 1m3 a 2000m3

El depósito flexible es una solución perfectamente adaptada para el almacenamiento de sus fertilizantes líquidos, especialmente la solución de nitrógeno. Almacenar su solución de nitrógeno puede ahorrarle varios euros por tonelada, ya que podrá comprar y almacenar su solaz cuando los precios sean bajos. La amplia variedad de cisternas flexibles le permite almacenar desde 1 m3 hasta 400 m3.

Algunos depósitos flexibles están especialmente desarrollados para contener aceites e hidrocarburos. Este tipo de depósitos son muy resistentes a la corrosión, estancos, representan una solución de almacenamiento a medida, son compactos, plegables y fácilmente transportables. La capacidad de almacenamiento oscila entre 1 m3 y 300 m3.

Por último, el servicio de bomberos también puede confiar en las cisternas flexibles para actuar como reserva contra incendios. Estos depósitos flexibles permiten a los bomberos disponer de cisternas cerca de las zonas de riesgo y, al mismo tiempo, desplazarlas e instalarlas rápidamente.

¿Cuál es el precio de un depósito flexible?

Evidentemente, el precio de un depósito flexible variará mucho en función de la capacidad de almacenamiento que desee tener. Para una cisterna flexible de 30 m3, hay que contar entre 700 y 900 euros, dependiendo del fabricante y de la calidad de fabricación. No olvide tener en cuenta los posibles gastos de transporte, el coste de la compra de accesorios como bombas, válvulas o colectores.

¿Cómo instalar su depósito flexible?

Un depósito flexible tiene la ventaja de ser fácil de instalar. A la hora de instalar una cisterna flexible, lo primero que hay que hacer es preparar la superficie sobre la que se va a instalar. En primer lugar, asegúrese de que el suelo es plano, horizontal y compactado para garantizar que nada pueda perforar o dañar su depósito. La superficie elegida también debe poder soportar la carga del depósito lleno sin hundirse. Por lo general, es necesario y aconsejable disponer de un lecho de arena de entre 5 y 10 cm de grosor que actúe como zona de amortiguación entre la superficie y su depósito flexible. Si quiere ser aún más cuidadoso, también puede instalar un geotextil o una lona para evitar que la vegetación vuelva a crecer. Por último, si dispone de medios, puede ser una buena idea instalar un terraplén alrededor de la cisterna para evitar la congelación y mejorar su capacidad de retención.

Cuando reciba su cisterna flexible, estará enrollada. Por lo tanto, es aconsejable desenrollarlo hasta unos 50 cm en un lado de la superficie preparada. Una vez que lo haya desenrollado a lo largo, puede desenrollarlo por ambos lados. Recuerde agitar bien su depósito flexible para expulsar el aire y facilitar la colocación final de su producto.

En muchos casos, también será necesario que instale usted mismo los accesorios y las válvulas. Es importante leer atentamente las instrucciones de instalación para garantizar la resistencia y estanqueidad del depósito.

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